¿De qué se trata El Ringo?

El ringo es un deporte de cancha dividida que se practica tanto en la modalidad de individuales como por equipos y que consiste en el lanzamiento de un aro de goma sobre una cuerda situada aproximadamente a la altura de una red de voleibol (Méndez, 2003, pág. 246)[1].

Fue creado en Varsovia (Polonia) en 1959 por Włodzimierz Strzyżewski, capitán del equipo polaco de esgrima, con la intención de tener un sistema para mantener la forma física. El ringo se trata de un deporte que puede jugarse, por sus características, en cualquier lugar, además, no interfiere en el aspectos como la edad, la condición física o la habilidad. Actualmente se juega en más de 10 países de todo el mundo, tanto en su vertiente competitiva como educativa.

Las reglas fueron modificadas y adaptadas a las edades de los alumnos de 5º y 6º curso de educación primaria, reduciéndose a las siguientes: 

      El objetivo del juego es marcar puntos defendiendo tu campo y enviando el ringo por encima de la red al campo contrario o de manera que el equipo rival no lo pueda devolver. Cada equipo consigue dos puntos por su acierto o con el error cometido por el oponente. Jugaremos por tiempos, no por puntos.

      Vamos a usar canchas de bádminton y pondremos la red a 1,8 m. Los partidos serán por parejas o por tríos aunque habrá periodos de juego individual con un marcador colectivo. Los jugadores que no intervienen en cada tiempo ejercerán el rol de evaluador, entrenador o árbitro.

      El juego comienza tras la señal del profesor (“3, 2, 1, ¡ya!”).

      En individuales: la posesión del servicio se cambia cada 3 puntos. En un juego de dos aros: la posesión se cambia cada 5 puntos.

      Si uno de los aros toca la red, no interrumpe el juego ni se anotan ni quitan puntos. En cambio, si toca el mismo equipo dos veces seguidas la red, perderá un punto.

      El ringo debe volar más o menos paralelo al suelo. El lanzador debe de tocar el suelo, al menos con un parte de ambos pies y lanzar desde el lugar donde lo cogió o tras el paso de parada permitido. Parar el vuelo del aro provoca perdida de un punto.

      Esta permitido recoger el aro con cualquier mano, incluso con un dedo, pero con la condición de que se devuelva con ella.

      Sólo se podrá permanecer con el ringo 3 segundos. Si un jugador se retrasa en la devolución, el árbitro comenzará a contar en alto. Si el jugador no suelta el ringo en el tiempo estipulado, pierde un punto.

      En un juego de dos ringos, si el árbitro da la orden de parar el ringo, el segundo disco no puntúa y el juego será reiniciado con el servicio de dos ringos.

      El ringo sujeto en la mano no puede tocar ni el cuerpo del jugador ni el de sus compañeros, ni el suelo ni la red, ni el espacio bajo ésta.

      Los jugadores pueden adoptar cualquier posición en la cancha. Cada jugador lanza directamente el ringo sin pasárselo al compañero.

      Cuando un jugador recoge el ringo puede dar un paso hacia delante.

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[1] Méndez Giménez, A. (2003). Nuevas propuestas lúdicas para el desarrollo curricular de educación física: juegos con material alternativo, juegos predeportivos y juegos multiculturales. Barcelona: Paidotribo.